Si sales temprano de clase, qué mejor que tomar un cafetico y tal vez un dulce en la mejor compañía, embriagadas de incertidumbres, pensamientos encaminados al futuro y sentimientos encontrados.
Y es que hemos elegido nuestro hombro mutuamente para consultar acerca de las decisiones más importantes de nuestra vida, nuestros ojos para confiar cómplices miradas y nuestras manos para llenar páginas de vida en blanco que vamos escribiendo con nuestras experiencias.
Gracias Cris por ser mi compañera, mi amiga, una de tantas lucecitas que dais sentido a mi vida.
1 comentario:
Hola cariño! Yo me pongo mu sentimental con estas estas cosas... Gracias por dedicarme un cachito de tu blog. Gracias por las milhojas, por los donuts de chocolate y por miles de momentos dulces, y también amargos, que he podido compartir contigo. Sabes que te quiero.
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