Acceder al correo electrónico de alguien,aunque sea pareja o amigo, es un delito que se castiga en España con penas de entre dos y cinco años. Pero además de estos hechos cada vez es más habitual el "secuestro de las cuentas" para que el propietario del e-mail tenga que pagar un rescate por recuperar su cuenta. Los correos electrónicos han dejado de ser un espacio seguro en el que guardar secretos, confidencias o intimidades señala el inspector Juan Carlos Riuloba, jefe del grupo de policías de Barcelona que persiguen el delito en internet, cada vez son más las víctimas que se acercan a comisaría a denunciar el espionaje del correo electrónico.
La Brigada de Delitos Tecnológicos de la Policía está en alerta porque está aumentando de forma considerable el robo de contraseñas de correo entre internautas.
Los correos electrónicos han dejado de ser un espacio seguro en el que guardar secretos, confidencias o intimidades señala el inspector Juan Carlos Riuloba, jefe del grupo de policías de Barcelona que persiguen el delito en internet, cada vez son más las víctimas que se acercan a comisaría a denunciar el espionaje del correo electrónico.